Nueve son las jornadas que lleva la Ponferradina sin conocer la victoria, pues de ellas dos se saldaron con empates en Albacete, 2-2, y en Valladolid, 0-0, pero lo que parece imposible es que desde la jornada 17, que marcó Lolo Pavón en Lugo, y en la 19, que como antes decimos se empató a dos en el Carlos Belmonte ante el Albacete, con goles de Djordjevic y Berrocal, en el resto de los 7 partidos disputados ningún jugador blanquiazul consiguió perforar el portal del Alavés, Tenerife, Girona, Elche, Mallorca, Valladolid y Alcorcón, respectivamente.
Esa falta de gol es la signatura pendiente del equipo que ahora provisionalmente dirigen Tomás Nistal y Rubén Vega tras la destitución de Manolo Díaz. David Caiado si lo consiguió este sábado frente al Alcorcón tras un centro de Adán Gurdiel, pero el colegiado lo anuló por un fuera de juego inexistente, dejando helados a los jugadores y aficionados blanquiazules que ya estaban celebrando el tanto. Una pena, dado que ese tanto y además ante su afición demostraría, terminaría con la sequía goleadora de la Deportiva, así como ganar después de tantas jornadas sin hacerlo.
Un empate fuera de casa si es bueno, pero no así si el partido se juega en El Toralín, por cierto el terreno de juego del estadio, al igual que frente el Tenerife, debido a las intensas lluvias de la semana y a lo largo del partido, no se encontraba en las condiciones mejores para practicar buen fútbol, de ahí que nada haya que objetar a los 28 jugadores que disputaron el encuentro, pues han demostrado en este partido la gran profesionalidad que llevan dentro.
Todo esto supone que la Ponferradina siga en el puesto 16 de la clasificación con 28 puntos, pero ahora con un punto más respecto al equipo que marca el descenso, el Albacete, que perdió ante la UE Llagostera, así como las derrotas del Mallorca en Soria ante el Numancia, y la del Huesca en su estadio de El Alcoraz frente al Girona, pues de haber ganado estos dos equipos habían superado a los blanquiazules en la tabla.
Pensar en puestos de play off ya nos parece casi imposible, al ser 11 puntos los que les separan del equipo que ahora marca el último puesto que da opción a disputarlo, el CD Mirandés. Parece imposible ver que hace muy poco estábamos arriba, y ahora sólo miramos la forma de eludir el descenso, nos cuesta creerlo, pero esa es la realidad y lo que hace falta ahora es levantar cabeza, y la primera prueba la tendrán el próximo sábado a las 20:15 horas en El Toralín de nuevo, frente al Córdoba CF. El equipo tiene una buena ocasión de demostrar que hay una buena plantilla, pero esto tienen que plasmarlo en el terreno de juego.