“Yo también sobreviví a Freakzone”. Este es el lema que se podía leer en las camisetas de la presidenta de la asociación cultural Team Rocket, Clara Bailén, la vicepresidenta, Amelia Blanco, y la secretaria, Lara Pérez, durante la rueda de prensa que han ofrecido este martes en la tienda Shinigami Comics de Ponferrada para dar los datos de la última edición de la Freakzone celebrada entre el 24 y el 27 de marzo.
Cuatro jornadas en la que la feria volvió a demostrar que no para de crecer y que lo hace pese a cualquier dificultad. Si en la edición anterior, la de 2015, el evento congregó a 5.000 curiosos, este 2016, Freakzone reunió a 8.000 visitantes procedentes de distintos puntos de Castilla y León, Galicia, Madrid e, incluso, Barcelona. “Este año nos ha sorprendido la gran afluencia de gente desde el primer día, porque lo habitual es que las visitas se concentren durante el sábado y el domingo”, afirman desde la asociación cultural.
Cifras que hacen estar “muy satisfechas” a las organizadoras del Team Rocket, que no ocultan su “felicidad” al exponer las cifras de un nuevo éxito en el que sin duda ha influido la idea de ampliar la oferta de la feria.
Con la apertura a nuevos sectores, como es la ciencia ficción, abanderada por Star Wars, la idea era atraer a un público más mayor, fanáticos de la primera trilogía de la saga, la del Yoda más títere.
Aunque más allá de los torneos, los talleres, las proyecciones o los gameplays, el gran atractivo de esta nueva edición de la Freakzone fue la presencia de Jorge Saudinós y Jaime Roca, que han trabajado en el doblaje de series tan populares como One Piece, Oliver y Benji o Juego de Tronos.
Apoyo empresarial y olvido institucional
En la rueda de prensa, las tres representantes de la asociación también destacaron el apoyo de todos lo patrocinadores, más de 70 entre pequeñas empresas de Ponferrada, editoriales y desarrolladoras de videojuegos que han hecho posible una nueva edición de Freakzone que dispuso de un presupuesto de entre 5.000 y 6.000 euros, claramente inferior al de otros eventos similares como el Cómic Con de Gijón que cuenta con un presupuesto de entre 25.000 y 30.000 euros, además del total apoyo del Ayuntamiento asturiano.
A pesar de ello, los organizadores mantuvieron la entrada gratuita, ya que, como afirman desde el Team Rocket, “cobrar un euro o dos puede marcar la diferencia, más en época de crisis”.
En este sentido, las dirigentes del Team Rocket acusaron la falta de apoyo por parte del Ayuntamiento de Ponferrada, que ni siquiera cedió gratuitamente el recinto donde se desarrolló la feria, el centro cultural Río Selmo, limitándose a ofrecer la impresión de los carteles, y de una forma insuficiente, ya que habló de 30 copias cuando la Freakzone difunde más de 5.000. “Hace dos años recibimos mayor colaboración por parte del Ayuntamiento, hemos sufrido una pérdida de ayudas. Este año nos ha sido muy difícil contactar con el Consistorio y así pierden una oportunidad de promoción interesante, asequible y rentable”, sentenciaron las organizadoras.
Así, esta joven asociación cultural ponferradina, que cuenta con tres años de vida y 25 socios, hace honor al lema de sus camisetas, ya que ha logrado sobrevivir, y crecer, a una edición de la Freakzone que ha contado con muchas dificultades que gracias a la ilusión del Team Rocket no han repercutido ni en los datos de afluencia ni en la opinión de los visitantes, que disfrutaron de una feria gratuita y, de paso, conocieron Ponferrada, porque esta es la gran beneficiada de la feria, la ciudad. Y es que aunque para muchos el mundo friki sea todavía desconocido, no deja de representar un sector económico cada vez más pujante en la sociedad actual.