El Consejo de Ministros aprobó este martes el reparto de 283 millones de euros entre las comunidades autónomas para el Sistema de Apoyo y Atención a la Dependencia (SAAD), que permitirá comenzar con el plan de choque para reducir las listas de espera y mejorar las prestaciones.
De esta manera echará a andar este plan de choque, que pretende dar un vuelco a los cuidados con, entre otras cuestiones, una subida de las cuantías del nivel mínimo del 17 por ciento y la recuperación del nivel acordado, además de establecer objetivos prioritarios de mejora del SAAD para los próximos años, entre los que destacan reducir de forma sustancial las listas de espera y los tiempos de tramitación de las solicitudes.
El plan también pretende introducir mejoras en los servicios y prestaciones que garanticen una atención más adecuada de las personas dependientes. También aspira a un nuevo modelo residencial con centros más pequeños y fortalecer en gran medida la teleasistencia avanzada, de forma que muchos mayores y dependientes puedan seguir viviendo dignamente en su hogar.
Asimismo, el plan regulará la figura profesional del asistente personal y, a finales de 2022, todas las personas dependientes con grado reconocido que vivan en su domicilio deberán tener acceso al servicio de teleasistencia, que pasará a considerarse un “derecho subjetivo” ligado a la condición de dependencia.
3.600 millones para dependencia en tres años
El reparto acordado hoy recoge que casi el 19 por ciento de este fondo irá a parar a Andalucía, mientras que Cataluña percibirá el 16 por ciento y Madrid, un 12,27 por ciento. La inversión en el Sistema de Dependencia durante 2021, 2022 y 2023 será de 3.600 millones de euros, con los que echará a andar el plan de choque de dependencia, y este año la inversión debe ser de 600 millones de euros.
Además, para 2022 y 2023 el Gobierno se ha comprometido a llevar a los Presupuestos Generales del Estado unos incrementos similares y acumulativos para conseguir el objetivo fijado entre el PSOE y Unidas Podemos para reducir la lista de espera de la dependencia en un 75 por ciento, así como mejorar las condiciones laborales de los trabajadores revisando los conciertos.