La alcaldesa en funciones de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, comprometió este martes su “apoyo y ayuda” a su sucesor en el cargo, un día después de que el socialista Olegario Ramón anunciase un acuerdo de gobierno mediante el cual accederá a la Alcaldía gracias al apoyo de Podemos y Coalición por el Bierzo (CB). Defendiendo su legado en cuestiones como la reducción de la deuda o los proyectos ya en marcha, Fernández Merayo consideró que la “estabilidad” de la que disfrutará el siguiente regidor le permitirá gestionar un mandato “más fácil” que el actual. “Ojalá me hubisen dejado el Ayuntamiento así a mí”, afirmó.
En ese sentido, aseguró que en estos cuatro años, la deuda municipal se ha reducido del 95 al 45 por ciento. Además, el próximo alcalde contará con unos remanentes de tesorería de nueve millones para invertir en obras, a las que se suman las ya adjudicadas por un valor de cinco millones y las correspondientes al Área de Regeneración Urbana (ARU) de La Puebla Norte, dotado en su primera fase con otros 4,5 millones.
En la misma línea, la regidora en funciones instó a los grupos a comportarse con “lealtad y altura de miras” respecto al próximo equipo de Gobierno. “Lo único que tienen que hacer es no estropearlo”, subrayó Fernández Merayo, que lamentó no haber contado en este mandato con esa lealtad de lso grupos sino con un afán de “destruir por destruir”.
En cuanto al pacto anunciado ayer que permitirá a Olegario Ramón hacerse con el bastón de mando en la capital berciana, Fernández Merayo prefirió esperar a la constitución de la Corporación antes de valorarlo aunque deslizó una velada crítica a los intentos del candidato del PP, Marco Morala, por “seguir buscando sus opciones”.