El Ayuntamiento de Bembibre instala alarmas antirrobo en la Escuela Municipal de Música y en el bar de la piscina como método para ahuyentar a los ladrones. Ambos establecimientos sufrieron sendos hurtos el pasado mes de julio, el segundo en menos de dos años.
La peor parte se la llevó la escuela musical que registró pérdidas por valor de más de 7.000 euros. “Los ladrones forzaron la puerta de entrada y una vez dentro rompieron tres puertas de aulas: la del aula de viento, la de la clase de guitarra y también la puerta de acordeón, pero de ese aula no se llevaron nada”, explicaron entonces feuntes consultadas por este medio.
Los amigos de lo ajeno se llevaron al menos un saxofón barítono, un clarinete, una guitarra eléctrica Fender y un charango. Del bar de la piscina sólo se llevaron el dinero de la caja. Ninguno de los dos espacios contaba con sistemas de alerta de robos.
El alcalde de la villa, Manuel Otero, lamenta que las obras del nuevo centro de salud se estén demorando en el tiempo porque “la idea es ubicar la escuela de música allí, para evitar que se produzcan más robos de este tipo”. La licitación de la obra está en fase de preconcurso y el regidor de la capital del Bierzo espera que el proceso esté resuelto a lo largo del mes de septiembre.