PREMIOS MUJER 2024

Condenado a 12 años de prisión por un delito continuado de abusos sexuales a su hija desde que tenía cinco años

La sentencia obliga a indemnizar a la víctima con 20.000 euros por los perjuicios morales y psicológicos sufridos y a permanecer a 500 metros de distancia durante 15 años
Audiencia Provincial de Palencia

La Audiencia Provincial de Palencia condenó a un hombre a una pena de 12 años de prisión por un delito continuado de abusos sexuales a su hija menor de edad y a indemnizarla con 20.000 euros por los perjuicios morales y psicológicos sufridos.  Tras el cumplimiento de la misma, el hombre no podrá comunicarse con la víctima ni aproximarse a menos de 500 metros a su domicilio, lugar de estudio o de trabajo durante 15 años, según la sentencia facilitada por el Gabinete de Prensa del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

El dictamen no es firme por cuanto cabe interponer recurso de apelación para la Sala de lo Civil y Penal del TSJ de Castilla y León, por lo que deberá interponerse ante la Audiencia Provincial de Palencia dentro de los diez días siguientes tras la notificación de la resolución.

La sentencia prueba como el padre, entre los años 2004 a 2010, accedía con frecuencia a la habitación de su hija menor “para satisfacer sus deseos libidinosos, propósito que conseguía tras meterse en su cama y realizarle tocamientos por todo el cuerpo, chuparle los pechos y órganos genitales y en ocasiones, penetrarla vaginalmente, tras despertarse la víctima debido a la presión que ejercía su padre para culminar el acometimiento”. Además, en ocasiones, los hechos probados aseguran que la menor “se despertaba en la cama de su padre donde éste la llevaba para satisfacer sus deseos libidinosos”.

En el año 2010, con motivo del fallecimiento de la madre, una de las hermanas acudió a un Ceas, temiendo por el futuro de la pequeña, donde expuso su preocupación por el entorno familiar y se determinó que la hija, que contaba con once años en esos momentos, fuera a residir con sus abuelos paternos, a quienes se les ocultó lo que “su padre le estuvo haciendo desde los cinco años”.

Tras alcanzar la mayoría de edad, la víctima contó todo lo vivido de pequeña a una amiga, quien la animó a denunciar todo, al igual que su hermana mayor, por lo que, finalmente, el día 9 de marzo de 2018 testificó ante agentes de la Guardia Civil, iniciándose el protocolo de ayuda a víctimas de agresión sexual, contando con orden de protección respecto de su padre desde el día 13 de marzo de 2018, que está vigente en la actualidad.