El alcalde de Congosto y senador por el PP, Jorge García Vega, protagoniza una nueva edición de los Desayunos Digitales de EBD. El regidor hace un repaso a los proyectos que ha puesto en marcha en su municipio desde su llegada a la Alcaldía en 2021 y de su trabajo en el Senado, al que llegó el pasado 2023.
¿Qué objetivos se había puesto al convertirse en alcalde y hasta qué punto los ha alcanzado?
Nunca me había marcado objetivos porque todo lo que me ha pasado en estos tres años ha sido sobrevenido. Empecé en política gracias a Rafael Insunza, el anterior alcalde de Congosto, con el objetivo de echar una mano para mejorar el municipio, sin más pretensión. Desgraciadamente, a raíz de la muerte de Rafa hubo un vacío de poder, yo iba el cuarto en la lista y en aquel momento estimaron que fuese yo. A raíz de eso todo ha ido realmente rápido, nunca pensé ser alcalde y mucho menos senador, los objetivos se han ido marcando con el trabajo del día a día.
¿Cómo se compagina ser alcalde de su pueblo y senador?
Con mucha dificultad y con muy poco tiempo libre. El Senado en esta legislatura, por la situación que tenemos de país, el trabajo es casi diario y es interminable, no tienes descanso, y en un municipio pequeño eres alcalde 24 horas al día, estamos al servicio de la gente y tenemos que estar disponibles cuando nos necesiten. Eso es lo que más he puesto en valor de toda la gestión que hemos realizado.
¿Qué nos puede contar de su proyecto turístico para el embalse de Bárcena?
Hace unos tres años tuvimos una reunión con una empresa del Bierzo que tenía una idea para el aprovechamiento turístico del embalse. Me pareció buena y me puse en contacto con otros municipios afectados (Ponferrada, Toreno y Cubillos) y con Confederación, pero aquellas reuniones no fueron fructíferas. Hace aproximadamente un año nos volvimos a reunir y les transmití la necesidad de volver a intentarlo, y ahora estamos en esa fase para marcar unas directrices y presentar el proyecto a la Junta. Finalmente, cuando esté todo hilado, nos volveremos a reunir con Confederación porque realmente es la administración que más trabas nos ponía. Yo entiendo que es un proyecto que va más allá de los municipios implicados y hay que involucrar a administraciones superiores para acceder a fondos europeos.
En cualquier caso, en el borrador de presupuestos de la Junta ya aparece una partida para la pasarela sobre el embalse, que es parte de ese proyecto…
Estamos tremendamente agradecidos de que aparezca. Es la punta de lanza del resto del proyecto porque la pasarela ya no es sólo a nivel turístico, sino que es paso del Camino Olvidado original. Por algo hay que empezar y esta pasarela es el punto de partida.
Hablaba de esa implicación de otros ayuntamientos, ¿qué tal son las relaciones con los alcaldes del entorno?
Francamente muy buenas, y es como debiese ser en la política. Hay dos ayuntamientos del PSOE y dos del PP, pero cuando hay proyectos comunes que son buenos para todos y para la comarca entiendo que todo el mundo tiene que hacer un esfuerzo. En ese sentido siempre hemos ido de la mano, por ejemplo en el tema de la pasarela con Cubillos. Ahora hay que hablar con Toreno y Ponferrada, que entiendo que les va a gustar el proyecto y no habrá ningún problema para que podamos presentarlo en un tiempo prudencial.
Ha planteado una reforma de la normativa urbanística en Congosto. ¿Ha detectado la necesidad de crear nuevas viviendas en su municipio?
Afortunadamente tenemos esa demanda de vivienda, casi todas las semanas hay gente que viene a preguntar tanto para alquilar como para comprar terrenos para edificar. Es un pueblo muy bonito, con unas posibilidades tremendas y con la particularidad de que está muy bien comunicado, tienes esa vida de pueblo apartado de todo el mundo pero estás a dos kilómetros de la autovía. Es necesario porque las normas urbanísticas aprobadas en 2011 están obsoletas porque su desarrollo coincidió con el boom inmobiliario y tenemos sectores de suelo a urbanizar que son inviables para una persona física o el hándicap de que hay zonas en las que es inviable construir por el coste que supone al propietario en cuanto a infraestructuras. Tenemos que revertir esa situación y dar facilidades a que tengan acceso a todos los servicios. Hemos empezado hace tiempo pidiendo presupuestos a técnicos, sabemos que va lento pero es uno de los objetivos que nos hemos propuesto porque va a hacer un bien grande al municipio.
Luego estamos estudiando la vivienda para jóvenes, donde el problema es que el Ayuntamiento no tiene terrenos propios y valoraremos la compra de algún terreno para entrar a formar parte de la construcción de vivienda pública.
También ha llevado a cabo numerosas actuaciones en infraestructuras deportivas.
Hay inversión ejecutada, con una zona polideportiva en Congosto, en Cobrana están empezando las obras de una zona deportiva al lado de las antiguas escuelas y, sobre todo, la mayor inversión que hemos hecho y que seguiremos haciendo es en las piscinas municipales de Almázcara porque hay que darle un plus a los ciudadanos para que puedan disfrutar de esas instalaciones. Hemos hecho una zona de toboganes, una pista de pádel y otra polideportiva. A corto plazo seguiremos ampliando la zona de ocio de las piscinas porque en los dos años que llevan en funcionamiento ha subido un 300 por cien la asistencia.
En cuanto a patrimonio, tienen una joya como el Monasterio de San Miguel donde quieren construir un albergue. ¿Cómo va ese proyecto?
Tenemos toda la documentación y el contrato de cesión de las monjas, que son las propietarias, para sacar a licitación la obra en breve. Esperamos iniciar las obras antes de que finalice el año. Era importante encontrar un enclave que diese sentido a los caminos que tenemos en el municipio, el Olvidado y el del Manzanal, y también es un atractivo turístico que nos hayan cedido este edificio no sólo para albergue sino como zona de referencia para actividades culturales. Luego, todo va unido a la demolición y acondicionamiento de las antiguas escuelas de San Miguel. Cuando acabemos esa obra, el lavado de cara que le vamos a dar a esa zona va a ser muy importante.
En su faceta de senador, ¿cómo valora la crispación del debate político nacional?
El ambiente que se respira es muy complicado en esta legislatura. Cuando entré en el Senado todo el mundo me decía que era una cámara más tranquila, pero le puedo asegurar que no. Es más, hasta la fecha llevamos 13 leyes aprobadas por una o dos en el Congreso, y en cuanto a actividad plenaria no doblamos al Congreso, pero sí ha sido mucho mayor. El mayor problema que le veo es la polarización que se hace de la vida política e incluso de la vida social, porque todo se transmite a la sociedad. El ejemplo que se está dando no es el mejor y eso es responsabilidad nuestra, pero es verdad que con este gobierno es difícil llegar a acuerdos.
¿Cómo rebatiría la mala prensa que tiene el Senado entre la sociedad?
No puedo hablar por lo de antes, pero ahora mismo el Senado es uno de los diques de contención al Gobierno y el trabajo es frenético, tenemos una exigencia muy grande dada la situación que tenemos en el país. Incluso nos han aumentado la actividad plenaria de dos semanas al mes a mínimo tres, pero la situación del país así lo requiere.
Las últimas noticias sobre la línea férrea Ponferrada-León no parecen muy halagüeñas. Como representante de la zona en el Senado, ¿cómo valora estas noticias?
Para mí, lo más importante para que una comarca crezca son las infraestructuras, porque la sanidad y la educación van ligadas a ellas. Sin infraestructuras no va a haber empresas, sin empresas no hay trabajo y la población va a ir disminuyendo, y si disminuye vamos a tener peor calidad de sanidad y educación. Hemos preguntado en varias ocasiones en el Senado al ministro Puente y todo han sido buenas palabras, pero a la hora de la verdad se está viendo que aquí no van a invertir. Tienen otras prioridades en Cataluña y el País Vasco, que son los que les están manteniendo en el gobierno, y al final la ciudadanía se tiene que dar cuenta de lo importante que es llegar a acuerdos de financiación autonómica y que tengamos lo que merecemos. A nivel de infraestructuras llevamos olvidados muchísimos años y cada vez más aislados y con más problemas para asentar población. El Corredor Atlántico y el nudo del Manzanal son básicos. No puede ser que el Corredor Mediterráneo lleve más de 7.000 millones invertidos por cero el Atlántico. El Gobierno tiene que apostar no sólo por el Bierzo, sino por todo el noroeste de España.
Hace poco lo dije en el Senado, donde estoy en la comisión de Reto Demográfico: podemos hacer mil políticas y mil ideas, pero al final eso es una gran mentira. Si quieres fijar población y apostar por que la gente del mundo rural tenga futuro, tienes que invertir en infraestructuras.