Padres y madres de escolares del colegio Valentín García Yebra de Ponferrada denunciaron hace un par de semana que las aguas fecales inundan el gimnasio y las aulas, baños e instalaciones del sótano cada vez que llueve. “El problema ya no es de este año y los niños tienen que ir al gimnasio y a las aulas para poder tener sus clases, estén inundadas o no”, indicaron a este medio. Asimismo, se quejaban de que “la dirección del centro o no ha hecho nada o no le hacen caso y como siempre pasa en estos casos, Ayuntamiento, Junta, Diputación o Estado (no sabemos de quién es la responsabilidad) se pasan el muerto de unos a otros y nadie hace nada”.
Lo cierto es que sus quejas esta vez sí que parece que han surtido efecto. Este miércoles el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de la capital del Bierzo, Roberto Mendo, aseguró que en los próximos días se van a realizar dos actuaciones urgentes para solucionar el problema de aguas fecales: “Es un problema que no es de ahora. Se hizo un estudio y en el mismo quedó claro cuál era el problema. Vamos a cambiar el colector de salida de aguas y a instalar un sistema de bombeo para que no se produzcan nuevas inundaciones”. Educación por su parte tendrá que hacer también alguna actuación, pero a priori el problema está resuelto.