La asociacion Hispania Nostra, declarada de utilidad pública y dedicada a la defensa del patrimonio natural y cultural español, ha incluido en su “lista roja” al complejo ferroviario de la Placa. Desde Hispania Nostra, afirman que “no cuenta con figura de protección dentro del Catálogo Urbanístico Municipal del PGOU pese a que en 1998 fue registrado en el Inventario Monumental de la Concejalía de Cultura”.
Según denuncia la asociación, el patrimonio industrial en este barrio ponferradino “presenta una seria amenaza de desaparición” y un “avanzado estado de deterioro”, lo cual no impide que mantenga una alta capacidad para explicar “las relaciones funcionales del transporte ferroviario, de los procesos de mantenimiento de tracción vapor, electrificación y trasvase del carbón, sobresaliendo por su escala como espacio de contemplación”.
“A nivel histórico, el alcance de las instalaciones refleja su papel central en la política energética de la posguerra; pues ilustra, como pocos enclaves, el interés del Estado por resolver las serias carencias de carbón por las que atravesó el país”, afirman desde Hispania Nostra.
“A escala local, la Placa constituye un símbolo de los barrios más próximos y está fuertemente ligado a la memoria ferroviaria del noroeste, como ‘hermana chica’ de la Rotonda de Monforte. No se puede pasar por alto el papel que jugó a mediados del siglo XX, el alcance del carbón suministrado desde los cargaderos de la Placa a todos los puntos del país, en la configuración de la imagen de Ponferrada como ‘ciudad industrial’, que se conserva en la memoria de las generaciones más mayores”, señalan desde la asociación.
Patrimonio berciano en riesgo
Otras piezas del patrimonio de la comarca que han sido señaladas en la lista roja de Hispania Nostra son la iglesia de San Pedro de Villarino, en Manzanedo de Valdueza; la iglesia de San Bartolomé y Casa del Cura, en Ferradillo; la iglesia parroquial de Santa Lucía en Santa Lucia de Valdueza; el poblado minero de Peña del Seo, en Cadafresnas; y el castro de la Peña del Hombre o de Coba de Mouram en Paradela de Muces.
La Casona-Palacio de los Álvarez Carballo, en Orallo, en Laciana, también está en la lista.
Han abandonado esta lista el castillo de Sarracín, los canales romanos en el Bierzo y la Cabrera que alimentaron la explotación de Las Médulas y el monasterio de San Pedro de Montes en Montes de Valdueza.
Es increíble la alegría con la que se pretende gastar el dinero público, recuperar estas instalaciones costaría un dineral que hace falta para muchas otras cosas, en especial para atender a los más necesitados, dicho esto una vez recuperadas las instalaciones habría que mantenerlas, vigilancia, mantenimiento, gestión etc. Me indigna que mientras que se están demoliendo instalaciones industriales para dejar el entorno como estaba antes de su construcción, al mismo tiempo se esté pensando en gastar grandes cantidades de dinero público en recuperar ruinas que no tienen ningún valor.
A falta de imaginación, me temo que parte de los fondos europeos para la pandemia va a terminar como terminaron los fondos MINER, repartidas entre ocurrencias de los ayuntamientos, ocurrencias vacías , sin futuro , ocurrencias que solo han servido de vehículo para trasladar dineros públicos a manos privadas , vía beneficio empresarial de obras de nulo interés y utilidad social, es preferible darle el dinero directamente a las personas que a cambio deberían de prestar labores sociales, trabajos para el medio ambiente y demás empleos públicos. NO se puede volver a repetir el escándalo de los fondos MINER.