PREMIOS MUJER 2024

El policía nacional Gómez o el contrabandista de arte Mario

Un ex comisario de Policía recibe uno de los más prestigiosos galardones italianos por su actuación como infiltrado, hace 36 años, en una red contrabando de arte, con la que consiguió recuperar el cuadro 'La Madonna y el Bambino', obra de Liberale da Verona, discípulo de Tintoretto
Gómez saluda a los presentadores de la gala y a otros premiados (F. Pio Alferano)

 

Violeta R. Oria Italia, mayo de 1978. El país está conmocionado. Hace unos días ha aparecido el cuerpo sin vida del presidente de la Democracia Cristiana y ex primer ministro Aldo Moro, secuestrado dos meses antes por las Brigadas Rojas. Un coche viaja desde Milán a Torino intentando no levantar sospechas entre los numerosos controles policiales que salpican las carreteras. Transporta a dos contrabandistas de arte italianos, un ciudadano alemán y un comprador de arte español -nada legal-, de nombre Mario. Solo que no se llama Mario. Y el grueso reloj que lleva en la muñeca y la cadena con una gran herradura que cuelga de su cuello, ambos de oro, no son suyos, se los han prestado para representar mejor su papel. Es un policía español infiltrado en busca del cuadro ‘La Madonna y el Bambino’, robado en enero de ese año a un coleccionista privado y obra de Liberale di Jacopo della Biava, conocido como Liberale da Verona, discípulo de Tintoretto.

Parece una novela, pero no, la historia es real, y su protagonista es el comisario jubilado Tomás Gómez, nacido en 1942 en el pueblo leonés de Villafer, a orillas del Esla. Por su actuación en este caso, en concreto por “su brillante capacidad investigadora que permitió recuperar obras de arte”, fue galardonado el pasado 2 de agosto en Italia con el prestigioso premio Pio Alferano, creado en 2011 y otorgado por la Fundación del mismo nombre. El galardón le fue entregado en una ceremonia celebrada en la localidad de Castellabate, en la región italiana de Campania.

Aunque han pasado 36 años desde que cerrara el caso, la misma edad que tenía entonces, Tomás Gómez se acuerda perfectamente de cada detalle de la operación, pues fue la más “espectacular” de su vida laboral, desarrollada en su mayor parte en Palma de Mallorca, donde llegó a ser comisario.“Fue en Palma donde comenzó todo. Era abril de 1978. Un amigo alemán me habló de dos italianos que andaban buscando compradores de arte y mencionaron el cuadro… decidí probar a ver si salía algo de todo aquello. Les presenté el caso a mis superiores y tras confirmar con la Interpol  -ahora Europol- que sí, que era un caso “caliente” –se había presentado denuncia por el robo del cuadro- me dieron permiso. Yo trabajaba, y he trabajado casi toda mi carrera, en Estupefacientes. Así que aquello era nuevo para mí”, explica.

‘Mario’ entra en acción

IMG_20140918_131241A partir de este momento, la Policía Nacional, la Interpol y los Carabinieri italianos comienzan a planificar la estrategia. “Yo tenía que conseguir fotos, del cuadro y de las obras de arte que en general me ofrecían;  pero los contrabandistas  me las enseñaban,  no me las daban…. Finalmente conseguimos entrar en su habitación y fotografiar sus propias fotos sin que se dieran cuenta”, continúa.

Es entonces, cuando el caso sufre su primer revés. “A continuación me entrevisté en Madrid con dos carabinieri y les enseñé las fotos, pero no identificaron la pintura; la obra provenía de una colección privada y solo los expertos la conocían bien. Fue una decepción. No obstante, se llevaron las fotos a Italia y unos días después de su regreso me llaman desde allí y me dicen que sí, que se trata de una obra de valor. Y el caso sigue adelante”, narra el comisario.

Es en este momento cuando el policía, acompañado de su enlace alemán, inicia el viaje desde Milán a Torino con los dos contrabandistas. Es el 11 de mayo. En Torino le enseñan otras obras pero el cuadro no está. Le comentan que debido al asesinato de Aldo Moro lo han sacado de Italia por seguridad y lo han llevado a Ginebra, en Suiza. Que si quiere puede ir a verlo allí. En este punto, Gómez es consciente por primera vez del riesgo que está corriendo. “Era joven, me gustaba mi trabajo. Todo había sido muy rápido… Pero si me iba a Suiza me iba solo, sin la protección y el apoyo de los Carabinieri. Y me fui”.

Una vez en Ginebra,  Tomás Gómez, Mario para los contrabandistas, es llevado a un caserón, en la montaña, en un cinquecento conducido por gente desconocida. Allí ve el cuadro por primera vez y Gómez lanza su órdago. “Después de decir sí al precio, 600.000 dólares, les pido que la operación se realice en Italia –allí esperan los Carabinieri-. Les comento que lo tengo todo preparado para que el cuadro salga para EE UU, de manera ilegal, claro, que desde Suiza no puede ser”. Y  finalmente los convence sin levantar sospechas. El 12 de junio el cuadro ya está en Milán. Los contrabandistas citan a Mario en un párking. Pero Mario no va. En su lugar llegan los Carabinieri y recuperan el cuadro y otras muchas obras de arte.

Momento en el que el ex comisario recibe el galardón

 

 Un premio 36 años después

36 años después, tan solo hace unos meses, Tomás Gómez recibe una llamada de Italia, de la Fundación Pio Alferano, desde donde le comentan que le han premiado por aquella acción, y le invitan a ir a recoger el galardón -uno de los más prestigiosos de Italia relacionado con el arte y el patrimonio- en persona a Castellabate, a una gala retransmitida por la RAI para todo el país. Gómez es el único extranjero de los ocho premiados, entre los que figuran famosos artistas y gestores de Italia. “Me quedé de piedra, primero pensé en no ir pero luego, ante su insistencia, viajé hasta allí con mi mujer. Fue toda una experiencia”, comenta.

 Gómez y su lucha contra las drogas

Si bien está fue la operación más arriesgada, Tomás Gómez se ha destacado durante sus 44 años de servicio por su trabajo en Estupefacientes. Su compromiso personal en la lucha contra las drogas le ha llevado a escribir, ahora que está jubilado, un libro con consejos para evitar el consumo de drogas por parte de los adolescentes. El libro saldrá a luz en breve.