La pedánea subraya que “no se trata de limitar el número de visitantes” sino de “organizar bien” la llegada de coches y el consecuente “atasco” que generan en la localidad ponferradina
Ángel Calvo confía en que en 2018 se puedan empezar a ver las primeras obras aunque el funcionamiento del proyecto en el plazo de un año asegura que es “imposible”