La Hermandad Jesús Nazareno ha conseguido que su caso sea uno de los siete indultos aceptados por el Consejo de Ministros para esta Semana Santa, después de que ya lo hubiese intentado hace dos años. “Me quedaba un año y medio de prisión y realmente este indulto supone el comienzo de una nueva vida para mí. Casi me desmayo cuando me dieron la noticia, no me lo esperaba”, declaró nerviosa la expresa.
La mujer ya había cumplido tres cuartas partes de su condena, después de cinco años en prisión, por un delito que explica ella misma. “Fui a buscar drogas donde no debía. Ni fumo, ni bebo ni me drogo pero la crisis económica me llevó a hacerlo. Una hipoteca, gastos de instituto… Muchas cosas. Ahora me planteo la vida un poco complicada pero espero encontrar trabajo. Tengo un currículum bastante bueno y trabajo bien. Me voy de Bembibre porque me conoce todo el mundo. Vengo de una buena familia y la única oveja negra soy yo y mejor me voy. Aquí no hago nada. Las circuntancias en las que estaba, meterme en lo que me metí, mi familia son todos policías nacionales…. No me quedo”, subrayó.
Como últimas palabras, agradecimiento eterno a la Hermandad por este indulto que abre las puertas a su nueva vida lejos de prisión.