La campaña de adjudicación de viñedos llevada a cabo por el Consejo Comarcal y la Denominación de Origen (DO) Bierzo está siendo un “éxito”. Así lo han calificado este martes tanto el presidente de la institución territorial, Gerardo Álvarez Courel, como la presidenta del Consejo Regulador de la DO, Misericordia Bello.
Ambos han coincidido en destacar que la iniciativa puesta en marcha el pasado mes de octubre está logrando su objetivo, que no es otro que frenar el abandono de las viñas e impulsar la recuperación de las mismas, ampliando el número de cultivos. De esta forma, la campaña ya ha logrado adjudicar 107 parcelas de viñedos que corresponden a 37 hectáreas en sus primeros cinco meses de existencia. Cifras que han supuesto un impulso a los datos del Banco de Tierras, que desde su creación en 2013 ha asignado 256 parcelas, es decir, unas 81 hectáreas de viñas.
El sistema que se emplea en esta campaña es muy sencillo, aquellas personas propietarias de tierras de cultivo vitivinícola que no puedan o no quieran trabajar las fincas tienen la oportunidad, a través del Banco de Tierras y de la DO, de realizar una cesión de uso en precario de las mismas a un agricultor para que este las mantenga en producción. Las cesiones suelen tener una temporalidad de dos años prorrogables a decisión de las partes implicadas.
“No es un gasto, es una inversión”
“Los resultados han sido muy positivos y ha sido gracias a la colaboración entre entidades. El Banco de Tierras comunicaba a la DO las parcelas recuperadas para promover su incursión dentro de la DO, así como facilitar los cambios en la titularidad de las tarjetas vitivinícolas. Por su parte, la DO facilitaba información para aquellas personas que quieran darse de baja y ofrecer esa alternativa para que sus viñedos puedan seguir siendo productivos aunque ellos no los trabajen”, ha explicado Gerardo Álvarez.
El presidente del Consejo Comarcal ha continuado señalando que los buenos resultados se deben a la utilidad de esta iniciativa ya que “a partir de la vendimia muchos propietarios comenzaron a incluir esos viñedos en el Banco de Tierras porque no podían hacerse cargo de su cultivo, la mayoría por una edad avanzada o una salud delicada”. “Hemos constatado la preocupación del propietario porque la plantación se pueda quedar abandonada, ya que tras cuatro años de inactividad las viñas se vuelven irrecuperables y tiene un coste muy elevado su rehabilitación”, ha declarado Courel, para concluir afirmando: “Estos son datos y si hemos recuperado 37 hectáreas es ya suficiente justificación para la inversión realizada, porque esto no es un gasto, es una inversión”.
Agradecimiento de la DO
Por su parte, Misericordia Bello ha manifestados su “felicidad” por los resultados de la campaña y ha agradecido la colaboración del Consejo Comarcal, sin la cual “no sería posible realizar este proyecto”.
“En esta primera fase se trata de frenar el abandono y recuperar lo recuperable, ampliar las superficies de cultivo sería un segundo paso”, ha concluido la presidenta de la DO Bierzo.