La expedición de la Ponferradina llegó a Girona, donde este sábado disputa una nueva jornada de LaLiga SmartBank, pasadas las tres de la madrugada después de que un problema en el aeropuerto de Santiago retrasara el vuelo que debía llevar a los blanquiazules a Barcelona.
La salida del avión, prevista para las siete de la tarde, se retrasó alrededor de cinco horas, obligando a cambiar los planes previstos en cuanto a cena y descanso de los jugadores. Finalmente, el equipo llegó a Girona en torno a las 3.15 horas de la mañana después de hacer por carretera el trayecto entre el aeropuerto de El Prat y la capital gerundense.