PREMIOS MUJER 2024

La Deportiva no pasa del empate ante la Arandina (0-0)

El equipo blanquiazul solo saca un punto en un partido sin apenas ocasiones y no aprovecha el tropiezo del Pontevedra ante el Izarra
Partido entre la Deportiva y la Arandina en la primera vuelta. / QUINITO

La Deportiva solo pudo sacar un punto en su visita a la Arandina (0-0) y no logró sumar un segundo triunfo consecutivo que relanzará su carrera hacia los puestos de ‘playoff’.

El conjunto berciano salió tímido al césped del Montecillo. Si ante el Boiro, Yuri ya avisaba en el minuto dos y Ríos Reina adelantaba a los blanquiazules en el siete, frente a la Arandina, los de Pedro Munitis salieron con el freno de mano echado.


En los primeros cuarenta y cinco minutos, la Ponferradina estuvo a merced de los locales. Dinu evitaba que un testarazo de Ruba adelantara a los burgaleses en el marcador y Rubén Garcés y Edu Paya no encontraban portería, mientras que los bercianos apenas asomaban por la portería de Nacho Zabal.

No era difícil, pero la Ponferradina mejoró tras el descanso. La segunda parte empezaba con un disparo lejano de Pallarés, una declaración de intenciones que venía acompañada de una propuesta más ofensiva que la del primer acto, con Menudo y Cidoncha más activos en la banda.

El ex de Albacete y Zaragoza volvió a mostrarse incisivo en el costado. Munitis ha conseguido encontrar la mejor versión del centrocampista alejándole de la sala de maquinas y dándole mayor libertad para incorporarse.

La Deportiva ganó presencia en el área rival, pero seguía sin meter el miedo en el cuerpo a una Arandina que llevaba diez jornadas sin ganar. 

El final fue fiel reflejo del actual momento que viven ambos equipos. Ni Arandina, ni Ponferradina son dos equipos solventes de cara a puerta, y a pesar de las necesidades de unos y otros, ninguno fue capaz de buscar los tres puntos en un arreón final.

Con este punto y la derrota del Pontevedra ante el Izarra, los bercianos dejan en tres puntos la distancia con el ‘playoff’, una diferencia que sigue reduciéndose a pesar de la irregularidad de los de Pedro Munitis.