Un cazador en Cosgaya (Cantabria) ha grabado un vídeo de un oso durante una batida y en él se ve cómo el animal deambula tranquilamente por el ponte y huye despavorido al ver al cazador. Hecho que para la Fundación Oso Pardo es un “claro ejemplo de lo que nunca hay que hacer en una cacería: dejar que un oso se acerque a un puesto de caza”.
La asociación conservacionista ha explicado en un comunicado que lleva tiempo “trabajando intensamente con cazadores; y hemos elaborado manuales de caza en zonas oseras para dejar claro que, ante la presencia de un oso, nunca hay que dejar que se acerque al puesto del cazador”.
Según explica la FOP, lo correcto es hacer que el plantígrado “nos identifique manifestando nuestra presencia, dejándonos ver y oír a distancia suficiente”. “No debemos mostrarnos nunca curiosos o con exceso de confianza y permitir que el oso se acerque a pocos metros para hacerle una foto o grabar un vídeo”. Esto, continúa la FOP, podría “provocar una situación de riesgo en la que el animal podría sentirse amenazado”.
Para la Fundación Oso Pardo, la actitud de este cazador “es una enorme temeridad y afortunadamente ha tenido la gran suerte de que la situación se resolviera sin consecuencias graves”.