Más de una hora, entre las 10,45 y las 12,00 horas, estuvo esta mañana cortado el tráfico de vehículos en la calle del Reloj de Ponferrada, con cortes también intermitentes para los peatones, debido al imprevisto surgido cuando los operarios municipales se dispusieron a meter un grueso tronco en el Museo del Bierzo: no entraba por la puerta.
En medio de las quejas de conductores y peatones, pitidos incluidos para desesperación de los vecinos, los operarios municipales se esforzaron, y sudaron, durante una hora, consiguiendo finalmente su objetivo. Se echó de menos a la Policía Municipal, una vez desatado el problema -tal vez nadie les volvió a llamar porque sí estuvieron previamente para organizar la llegada del tronco-. Aunque desde el Ayuntamiento se informa que se colocó una valla en la calle Paraisín para evitar la entrada del tráfico, lo cierto es que al menos una decena de vehículos accedió a la calle del Reloj, tal vez simplemente desde los garajes de la Plaza de la Encina o desde la zona de carga y descarga, teniendo que dar marcha atrás para salir del casco histórico por una ruta alternativa.
