El ciclón Elsa está llevando a los ríos del Bierzo a una situación límite. Las intensas lluvias caídas en las últimas horas sumado al deshielo de los picos más altos de la comarca ha provocado que los caudales se multipliquen por dos, incluso por tres, y se desborden. En consecuencia, la Policía Municipal de Ponferrada ha cortado al tráfico rodado este viernes la carretera de acceso a Toral de Merayo por el desbordamiento del Sil.
También está cortada desde esta mañana la carretera del valle del Oza por el desbordamiento del río a la altura del arroyo de los Mateos, la principal carretera de acceso al valle del Oza y a localidades de la Tebaida berciana como Peñalba de Santiago o Montes de Valdueza.
Se trata de dos de los puntos negros habituales en las carreteras bercianas en episodios de lluvias intensas y continuas. En el caso del desbordamiento del río Oza a la altura del arroyo de los Mateos es la causa que origina el corte. Según informaron fuentes municipales, en estos momentos ya hay maquinaria trabajando en la zona intentando minimizar los daños, pero la avenida de agua hace imposible que se pueda transitar por ese vial en condiciones de seguridad, remarcaron las mismas fuentes.
En el segundo caso, para acceder a Toral de Merayo, los vecinos tendrán que dar un rodeo hasta la vecina localidad de Villalibre de la Jurisdicción. En 2016, este vial ya permaneció cortado durante varias semanas debido a los temporales de finales del año anterior, lo que obligó a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (Chms) a ejecutar un proyecto de mejora de la capacidad de desagüe del río, con una inversión de 200.000 euros.
Por otro lado, las lluvias también provocaron serios problemas durante la noche en la localidad de Fuentesnuevas, donde la red de saneamiento se vio desbordada por la entrada de agua procedente del arroyo de los Barredos, según explicó el concejal de Seguridad de Ponferrada y alcalde pedáneo del pueblo, José Antonio Cartón.
Según su relato, los Bomberos estuvieron achicando agua hasta las 5 horas en diversos bajos y garajes que se inundaron. Además, algunas calles también se convirtieron en cursos de agua debido al atasco de una acequia de la zona. El edil criticó que el arroyo que ocasiona estos problemas “lleva mucho tiempo sin limpiar” y avanzó que iniciará un contacto urgente con la Chms para ejecutar una limpieza del cauce.
Por último, los Bomberos también tuvieron que intervenir en varios achiques de agua en la calle Cabo de Peñas, en el entorno del barrio de Compostilla, así como en la retirada de varios árboles caídos sobre la calzada. Durante la mañana de este viernes, Cartón se reunirá con los responsables de Policía Municipal y Bomberos, así como con el ingeniero jefe del Ayuntamiento para coordinar el dispositivo de respuesta ante este episodio de riadas.
Las calles de a ciudad de Ponferrada se convirtieron también en auténticos ríos y embalses. El aparcamiento de la calle Río Urdiales estuvo durante horas cubierta por el agua, tal y como se puede ver en las siguientes imágenes.
Ante la previsión de que siga lloviendo y la crecida del caudal del río Sil se mantenga, el Ayuntamiento de Ponferrada ha adoptado todas las medidas preventivas necesarias, cerrando la entrada a los paseos y zonas inundables. Queda por tanto absolutamente prohibido el acceso a los mismos. Se recomienda respetar la señalización y las instrucciones del personal de seguridad.
Similar era la situación en la pedanía ponferradina de Valdeñada.