El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, se desplazó este martes a Madrid para respaldar a su líder, Alberto Núñez Feijoó, durante la sesión de su investidura. El también presidente del PPCyL no quiso perderse este día crucial en la carrera política del “presidente que España necesita”, ya que, entre otras razones, “defiende la unidad, la igualdad y la libertad para todos, sin importar dónde residan”.
Antes del discurso de Feijóo, Mañueco evitó hacer comentarios, al igual que los demás líderes autonómicos que también asistieron a la Carrera de San Jerónimo. En las afueras del Congreso, el líder del PP regional posó junto a los diputados y senadores del PP de Castilla y León frente a la emblemática Puerta de los Leones del Parlamento, mostrando así el apoyo del partido a su presidente.
Además del presidente de la Junta, estuvieron presentes los líderes de Murcia, Fernando López Miras; Madrid, Isabel Díaz Ayuso; La Rioja, Gonzalo Capellán; y la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, entre otros. También mostraron su respaldo al líder del Partido Popular el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida; el líder del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez; y el exdiputado Adolfo Suárez Illana, junto a otras figuras reconocidas del partido.
Los invitados ocuparon la tribuna reservada para ellos en el Congreso, desde donde siguieron el discurso de Feijóo. El presidente de la Junta se sentó entre su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y el máximo mandatario de Ceuta, Juan Jesús Vivas.
La sesión comenzó con el discurso del candidato propuesto por el Rey para la investidura, Alberto Núñez Feijóo, quien presentó su programa de gobierno, que incluye propuestas como reducciones fiscales para las clases medias y bajas, así como un plan de atracción de inversiones. Además, Feijóo anunció que, en caso de asumir el Gobierno, endurecerá el Código Penal en lo que respecta al delito de malversación e introducirá el delito de deslealtad institucional, recuperando el espíritu del delito de sedición. Posteriormente, los portavoces o líderes de los grupos parlamentarios, en orden decreciente de representación, tomarán la tribuna del Hemiciclo para responder al discurso del líder popular.
Tal para cual, dos pinochos iguales para hoy, oiga.