La plaza del Ayuntamiento de Ponferrada fue escenario este lunes del minuto de silencio de la corporación municipal en recuerdo de las víctimas del los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, una convocatoria que partió de la Federación Nacional de Municipios y Provincias y que el consistorio ponferradino convirtió en “un acto de absoluta solidaridad”, en palabras de su alcalde, Marco Morala.
Morala transmitió “el recuerdo, el acompañamiento y la solidaridad con las víctimas de aquellos atroces atentados y con sus familiares y seres queridos, que veinte años después creo que han podido superarlo, quienes hayan podido, con muchísima dificultad”. El alcalde señaló que los atentados del 11-M fueron “un momento histórico que vino precedido por el 11-S y que nos cambió a la hora de vivir en lo que creíamos que era un mundo libre en el que teníamos la seguridad garantizada y podíamos ejercer nuestros derechos y libertades fundamentales sin ningún problema. Todo eso nos cambió la percepción como sociedad”.
Por otro lado, el regidor afirmó que “valorar otras cuestiones es baladí. En un Estado democrático y de derecho quien determina la autoría de los delitos son los tribunales de Justicia y no los medios de comunicación ni los partidos, con lo cual existe una realidad judicial incontesable hoy en día”.
De esta manera, Marco Morala hizo un llamamiento a “estar al lado de las víctimas, sus familiares y seres queridos, y no olvidarnos nunca de lo que pasó, de lo que se sufrió, y acompañar a los supervivientes en el día a día como una sociedad solidaria, democrática y libre como es la española”.