La alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, volvió a incidir en la necesidad de que la Diputación asfalte la pista entre Peñalba de Santiago y San Cristóbal para permitir el paso de los vehículos de emergencias en situaciones como el incendio vivido la semana pasada en la zona. Fernández Merayo informó que este miércoles ha tenido lugar una segunda reunión con los servicios de Bomberos y los técnicos municipales al objeto de cerrar la tramitación de la petición de zona catastrófica y de realizar un plan de protección civil que dé servicio no solo a la ciudad, sino a todo el medio rural del municipio.
La regidora rechazó cualquier tipo de responsabilidad en el incendio de la Tebaida por parte de las administraciones, tal y como ha apuntado el PSOE de Ponferrada en la mañana de hoy, destacando que todo el dispositivo funcionó coordinado y a la perfección en unas condiciones muy difíciles. “Es verdad que siempre se puede mejorar pero se ha tratado de un fuego intencionado, que el miércoles se dio por apagado y del que el jueves apareció otro foco. Hay brigadistas que han tenido que trabajar atados en pendientes, con vientos de 70 kilómetros por hora, y pilotos que se la jugado. Los bomberos de Ponferrada se han puesto en riesgo para que el fuego no entrara en las localidades…”, expresó, al tiempo que destacó que “el único culpable” es el incendiario. “Contra los incendiarios las sociedad tiene que tener tolerancia 0, hemos conseguido hacerlo con la violencia de género, con el alcohol al volante, ahora hay que hacerlo frente a los incendios”, matizó. Sobre la petición socialista para restaurar la Tebaida, la alcaldesa señaló que la Junta ya está trabajando en ello.
Sobre el plan encargado a la ULE en 2008 para la gestión de los montes de Ponferrada, y que finalmente nunca se ejecutó, lo que el PSOE entiende que hubiera ayudado a impedir la gravedad de siniestros como el incendio de la Tebaida, Merayo afirmó que se tendrá en cuenta pero que cuando un incendiario actúa ningún plan lo puede evitar.
La alcaldesa anunció que está a la espera de hablar hoy mismo con la ministra de Medio Ambiente, Isabel Tejerina, que está “muy implicada” en este suceso, y con el consejero Juan Carlos Suárez Quiñones. La declaración de zona catastrófica para el valle del Oza se deberá tramitar a través de la Junta de Castilla y León, a pesar de que en última instancia sea el Gobierno el que decida sobre la misma. De aprobarse, la zona recibiría una serie de ayudas para su recuperación.