No cabe duda que el hecho de rebajar el importe ya concedido de las becas Erasmus, una vez iniciado el curso, ha sido una metedura de pata del ministro de Educación. Por todo ello no podemos menos que agradecer que haya rectificado a tiempo. Algunos aprovechan ahora para pedir su dimisión, sin embargo otros no pedimos que dimita. No seamos ingenuos. Es muy difícil, por no decir casi imposible, que la oposición acepte cualquier reforma educativa liderada por el Partido Popular. Cualquier ministro de este partido será criticado siempre, a no ser que deje las cosas como están en materia educativa, es decir, mal.
No nos importa que Wert siga de ministro, a pesar de que lo de las becas Erasmus no sea la única metedura de pata. Más aun, le animamos a que siga adelante con la Ley para mejorar la educación, eso sí, esperando que vuelva a rectificar en algún otro aspecto en el que tampoco ha estado acertado.
Nos referimos concretamente al tema de la religión en bachillerato. Según los Acuerdos entre el Estado Español y la Santa Sede, con la categoría de tratado internacional, los centros tienen las obligación de ofertar la asignatura, aunque los alumnos sean libres para elegirla o no. Así ha funcionado y está funcionando hasta el presente. Ni a Felipe González ni al mismísimo Zapatero se les ocurrió dejar de respetar esto. Sean muchos o pocos, ahora los alumnos de bachillerato tienen la posibilidad de estudiar la asignatura de religión, pero lo que propone Wert es que quede a merced de los centros la decisión de ofertar o no la clase de religión en bachillerato, de forma que los alumnos no siempre tengan garantizado el poder estudiarla. Es decir, que en este caso, el Partido Popular es mucho peor que los socialistas. Por todo ello esperamos que también ahora el señor Ministro vuelva a rectificar.
La religión en bachillerato es muy importante por la temática que aborda. Permite a los alumnos poder contrastar la fe católica con otras enseñanzas, desde un punto de vista serio y académico. Ponemos un sencillo ejemplo: en clase de filosofía seguro que estudiará a Marx, a Nietzsche, a Freud, a Compte, a Sartre… personas muy influyentes en el ateísmo actual. ¿Acaso el alumno no tiene derecho a conocer la posición crítica del cristianismo ante estas teorías filosóficas?
Otros temas que se abordan en la religión de bachillerato son muy importantes para la vida, como es loa relación entre la fe y la ciencia, el compromiso social y político de un cristiano, la doctrina social de la Iglesia… Desconocer estos temas no deja de ser una forma de incultura. Aunque no todos los alumnos deseen combatir esta ignorancia, al menos debe dejarse la posibilidad de formarse a quienes así lo deseen.
Rectificar es de sabios. También en esto el ministro debe rectificar. Y si no lo hiciera tendríamos que decir que Rajoy y su partido serían responsables de este desaguisado, porque repetimos, no nos lleva a mejorar, sino hacerlo mucho peor que los que ahora están en la oposición.