EBD El consejero de Sanidad de la Junta, Antonio Sáez, afirmó hoy que en las próximas semanas se incorporarán dos nuevas prestaciones a la cartera sanitaria referidas a la denominada cirugía extereotáxica para determinados tumores cerebrales, junto a la realización de test genómicos que permitirán elegir en el cáncer de mama el tratamiento que más se adecua al paciente. La primera de las prestaciones se llevará a cabo en las unidades de referencia del cáncer en los hospitales de Burgos y Salamanca, mientras que el diagnóstico genético predictivo en tumores de mama se centralizará en el complejo hospitalario salmantino.
“Se trata de dos nuevos servicios que se incorporan como una prestación más a la sanidad pública de Castilla y León”, se congratuló el consejero, quien anunció su puesta en marcha en la firma de un convenio con la Asociación Castellano y Leonesa de Oncólogos. Sáez explicó que a las dos nuevas técnicas se unió hace algunas semanas en el Hospital Río Hortega de Valladolid una tercera para el tratamiento quirúrgico de cáncer peritoneal con quimioterapia intraoperatoria, habiéndose hecho ya las primeras intervenciones.
Por lo que respecta a la radiocirugía estereotáxica, la técnica se aplicará en el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca y en el de Burgos y se trata de una de las denominadas “nuevas tecnologías” en el campo de la oncología radioterápica para tratamientos de radioterapia externa. Es una técnica no invasiva, sin ingreso hospitalario, que consiste en suministrar altas dosis de radiación con mucha precisión, lo que evita efectos secundarios de la radioterapia convencional.
En torno al diagnóstico genético predictivo en relación con el cáncer de mama o test genómico, Sáez indicó que algunos casos permitirá orientar al tipo de tratamiento a realizar. “Se podrá ver si es más adecuado actuar con la radioterapia o quimioterapia, si es conveniente la cirugía, solo una de las opciones o combinarlas a través de un análisis genético previo”. Al respecto se prevé realizar en torno a unos 200 test anuales entre los más de 2.000 casos diagnosticados de cáncer de mama.
Convenio con los oncólogos
En la firma del convenio el consejero de Sanidad puso de manifiesto que para la Junta “es una prioridad” promover mejoras en la atención de los pacientes que padecen cáncer, después de más de un año de trabajo conjunto con la Asociación Castellano y Leonesa de Oncólogos “para tratar de coordinar mejor cómo se llevan a cabo todas las actuaciones”. En este sentido recordó que anualmente se registran en torno a 16.000 nuevos casos de cáncer en Castilla y León, sobre todo colo rectal, mama, pulmón y vejiga, al tiempo que señaló que en los niños la incidencia es “reducida” y los cerca de 60 casos se localizan en su mayoría en el el ámbito hematológico y el sistema nervioso central.
Para Sáez, se trata de definir mejor todo el proceso de atención oncológica y que los especialistas sean los responsables del conjunto de las actuaciones que se lleven a cabo. “Para ello contarán con el apoyo de unidades de diagnóstico, laboratorio, radiología, radioterapia, enfermería y el papel de los médicos de familia y profesionales sanitarios de atención primaria”, expuso.
Por su parte, el presidente de la Asociación Castellano y Leonesa de Oncólogos, el doctor Andrés García Palomo, añadió que en el convenio se plasma un trabajo anterior. “El objetivo primordial pasa por poder prestar el mejor trataniento al paciente de cáncer en toda la cadena asistencial, coordinando mejor todos los objetivos y esfuerzos”.
Convenios específicos
El desarrollo del protocolo prevé convenios específicos y, en primer lugar, destaca la definición de un proceso asistencial oncológico multidisciplinar y coordinado que cuente con el oncólogo médico como profesional responsable del proceso de atención, y que actúe como referente y coordinador entre todos los profesionales que participen en la asistencia del paciente oncológico.
El acuerdo, según apuntó el consejero de Sanidad, se refiere también a la puesta en marcha del denominado ‘Programa de largo superviviente en cáncer de Castilla y León’, que consiste en un proyecto de coordinación asistencial entre atención primaria y atención especializada, que parte de la necesidad de visualizar al paciente que ha superado un cáncer como una persona ‘libre de enfermedad’. Las revisiones necesarias del paciente considerado ‘largo superviviente’ (según criterios establecidos para cada tumor) serán llevadas a cabo por el médico de familia asesorado y apoyado por un oncólogo enlace.
Otro de los objetivos pasa por trabajar en la ordenación y modernización de los denominados Comités de Tumores de las Instituciones Sanitarias de Castilla y León, existentes desde 1997. A partir de este protocolo, las instituciones sanitarias que tratan procesos oncológicos se constituirán como un grupo de trabajo para su revisión y adecuación a las demandas asistenciales actuales. Se pretende también desarrollar grupos de trabajo multidisciplinares para la mejora de la eficiencia en el uso de herramientas diagnósticas y fármaco-terapéuticas en el tratamiento de los procesos oncológicos, dando prioridad a los más frecuentes -cáncer de pulmón, de mama, y colorrectal-.
Por último, se establecerán criterios de funcionamiento homogéneos en las consultas de Consejo Genético en Cáncer en la Comunidad. En consonancia con los programas de cribado de cáncer de Castilla y León, se dispone de tres unidades en los complejosa asistenciales de Burgos, Salamanca y Hospital Universitario Río Hortega, para cáncer de mama, ovario y colorrectal hereditarios. Se puso en marcha para mama y ovario en 2003 en Salamanca, ampliándose a colon en 2005 en Salamanca y Burgos, e incorporándose el Hospital Universitario Río Hortega en noviembre de 2009. Existe el proyecto decidido de impulsar estas unidades y se ha previsto una inversión en los presupuestos de 2015.