Saúl Ordóñez era uno de los únicos tres atletas españoles que este domingo saltaron a la pista en Eugene (Estados Unidos) para participar en la última prueba de la Diamond League, esa suerte de liga atlética que a lo largo del año va reuniendo a los mejores del mundo en 14 citas que miran de tú a tú al Campeonato del Mundo.
Con estos ingredientes, sólo cabía una 800 por todo lo alto y así fue. El atleta berciano tuvo que bregar con una carrera en la que el ganador, el keniano Emmanuel Wanyonyi, firmó una marca de 1.42.80 que le convierte en el más rápido del año en la distancia. Tras él, el campeón del mundo Marco Arop batió el récord de Canadá con 1.43.24, mientras que el tercero y el cuarto, Djamel Sedjati (Argelia) y Yanis Meziane (Francia), también hicieron sus mejores marcas personales.
Ante esta situación, Ordóñez se tuvo que conformar con el octavo puesto y una marca de 1.45.90 en un apretado final con el francés Benjamin Robert.