Soy Elisabet Alba, tengo 26 años y soy periodista. Lo primero, siempre, las presentaciones. Como anécdota, para coger confianza, diré que no me acuerdo, pero casi podría asegurar que empecé a hablar tan sólo por el gusto de discutir, y desde entonces no he parado.
Me gradué en julio de 2014, hice prácticas no remuneradas ese verano al igual que había hecho el anterior y las enlacé con mi primer contrato, como becaria. De becaria pasé a trabajadora a tiempo parcial y a un puesto indefinido a tiempo completo. No se puede decir que tenga una trayectoria profesional dilatada pero sí aprovechada.
Hace semanas me ofrecieron crear una Columna de Opinión, mi Columna de Opinión, y pensé, ¿qué tengo que aportar yo con la de firmas relevantes que están ya a diario escritas en negro sobre blanco? Tengo mis gustos y mis disgustos, como todo el mundo. No me considero experta en nada ni siquiera especialista. No pretendo crear escuela y tampoco tener la razón. Lo que quiero es discutir.
Se está perdiendo el significado positivo del verbo, mi favorito por antonomasia. “El de examinar y tratar entre varias personas un asunto o un tema proponiendo argumentos o razonamientos para explicarlo, solucionarlo o llegar a un acuerdo acerca de él”, en definitiva aprender, y sin que llegue la sangre al río o a Twitter, que lo carga el diablo. Por eso estoy aquí.
Soy mujer, joven y además lo aparento. En mi vida personal y también profesional he recibido muchos gestos de desdén. De altivez y menosprecio. He escuchado gracias sobre mi edad o mi aspecto y en ocasiones hasta me he sorprendido justificándome por ello. Pero, ¿es que pasa algo?
Si tu cabeza ahora mismo está buscando un algo que pase, sólo por eso me he atrevido a escribir Opinión. Quiero que ser mujer y joven no sea, ni junto ni por separado, un pretexto para cuestionar las aptitudes y capacidades de nadie. Bien avanzado el siglo XXI y aún seguimos en esa guerra de pensamiento. Cometo errores a diario, me queda mucho por aprender y, por eso, discutiremos una vez a la semana, los miércoles, hasta que tenga este espacio. Espero que me acompañéis en este camino y discutamos y aprendamos entre todos.
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