“Hablamos de despoblación, hablamos de dar vida a la España vaciada y para luchar contra ella la caza es un elemento importantísimo, porque además siempre se hace manteniendo un estado de conservación favorable a las especies con un círculo perfecto de gestión responsable”, aseguró el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones.
Así lo apuntó durante su participación en la subasta de caza de la Reserva de los Ancares leoneses, que se celebró este sábado en Candín, un terreno “privilegiado y maravilloso” en el que “hay que vivir”, es decir, “tiene que tener actividad económica”.
Para Juan Carlos Suárez-Quiñones, la caza es “parte de poder vivir en estos territorios”. Una caza que “ha estado en riesgo” en Castilla y León pero que “una reacción rápida de las instituciones han motivado que se vuelva a tener actividad” como la hoy vivida, de subasta de aprovechamiento, a la que acudieron todas aquellas personas interesadas en abatir las piezas que se determinan para obtener a unos rendimientos económicos.
La Reserva Regional de Caza de Ancares es una de las nueve que tiene Castilla y León, junto con Riaño y Mampodre, tres en León, que suponen “terrenos en los que de forma generosa se cede el aprovechamiento económico a las entidades locales menores del territorio”, mientras que la Junta se encarga de la planificación técnica y determinar qué piezas sos susceptibles de ser cazadas “por tener un estado de conservación correcto y saludable”.
La subasta de caza de los Ancares afecta a cinco municipios a los que les será revertido el dinero obtenido de la misma, que será destinado a pagar servicios y los gastos propios del territorio. Así, según apuntó Suárez-Quiñones, los ingresos por esta actividad supone más de un 25 por ciento de los presupuestos, “recursos que de no tenerse supondría aminorar los beneficios para los ciudadanos”.
Asimismo, el consejero de Fomento puso de relieve la capacidad de esta actividad para mantener “la población equilibrada” para que “no incida negativamente en la sanidad ganadera, en accidentes de tráfico por invasión de las especies silvestres en las carreteras y un conjunto de beneficios al margen de los tradicionales, la cultura de la caza y la vida económica que generará en el territorio”.
No le han informado a este pseudo funcionario que la naturaleza durante miles de años a mantenido su propio equilibrio, sin necesidad de imbéciles matando cobardemente a madres con crías, a pequeños aún creciendo y cualquier ser vivo que no pidió ser “controlado”.
Y porque no mejor invierten en desarrollo del turismo y educación para obtener alternativas en beneficios económicos?
Aprovecho para responder a Luis, que con tan poco criterio insulta a Suarez Quiñonez. Q se lleva cazando tb miles de años, q genera miles de puestos de trabajo, q no necesita inversiones de las administraciones, si no q genera beneficios económicos para estas. Podria dar más argumentos, pero son suficientes para un cerebro tan reducido. He dicho.
Me sorprende que se llame imbécil a la gente que dedica a llevar a cabo un deporte y me parece que esta persona de está actividad no tiene ni idea habla de oídas. si quiere puede participar en una cacería y ver los animales que se matan. Por suerte en muchas zonas de España que están completamente deshabitadas viven del desarrollo de esta actividad, hoteles, pensiones, tiendas, hostelería y un largo etc. Creo que hay informarse o leer antes de sacar la lengua a pacer