El CSIC critica duramente la gestión de las Médulas y propone un plan de actuación y un centro gestor

Un escrito del grupo de investigación EST-AP del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas) con motivo del 20 aniversario de la inclusión de Las Médulas en la Lista del Patrimonio Mundial, dirigido a la consejera de Cultura, Josefa García Chirac, y al resto de miembros de la Fundación Las Médulas, “por nosotros conocidos”, critica duramente la gestión del paraje con una larga lista de deficiencias observadas por este grupo, así como de decisiones que considera erróneas. Además, los investigadores expresan sus quejas por la omisión, en los actos del 20 aniversario, del papel del CSIC, desde cuyo Instituto de Historia se coordinó durante ocho años (1988-96), “gratis et amore”  la investigación que condujo a la declaración.

Después de manifestar que con una gestión adecuada las Médulas podrían acoger un centro a escala europea de los países culturales, el escrito, redactado por Javier Sánchez-Palencia en nombre del grupo de investigadores, recuerda un proyecto en este sentido, del que se llegó a hacer un anteproyecto en 2004 que proponía como ubicación de dicho centro la horquilla de las carreteras Carucedo-Orellán-Las Médulas pero que quedó “en el olvido”.

Una domus sin fundamento científico y otra real tapada

Por el contrario, los expertos critican que se llevara a a cabo “la inefable Domus  Procuratoris (2010, Consejo Comarcal del Bierzo con fondos del Gobierno central), un estructura que adolece del más mínimo fundamento científico como modelo de lo que pretende ser”. Sin embargo, ponen de relieve que, no muy lejos de ella, en el asentamiento de Las Pedreiras, “yacen tapadas las estructuras reales de una domus de época romana en la zona“.

Crítica a la gestión privada del mirador de Orellán y al abandono de los castros

Los investigadores afirman asimismo no entender “la gestión privada del mirador de Orellán“, lo que “conculca la legislación en la materia“, y también denuncian la falta de visitas planificadas conjuntamente y que las visitas a zonas como la Frisga, las Perdices y Llagua de Yeres no estén en absoluto atendidas.

Lo peor, sin embargo, es en su opinión “las carencias en todo lo referente a los asentamientos relacionados con el poblamiento de la zona, cuya visita al público es práctiamente nula”. “Los dos prerromanos, el Castrelín de San Juan de Palazuelas y el Castro de Borrenes están la mayoría del año sin limpiar”. Por el contrario, afirman que sorprende, en contraste, “la costosa excavación de otro castro supuestamente prerromano, el de la Peña del Hombre, situado fuera de la zona declarada, que por su complicado acceso será dificilmente visitable”.

Turismo

El grupo de expertos lamenta asimismo que mientras crecen las iniciativas relacionadas con el turismo, un recurso para los habitantes de la zona, “la infraestructura pública que debería acompañar y propiciar la explotación racional de ese recurso está por llegar“. “Mientras eso sucede deberían, al menos, paliarse algunas deficiencias muy fáciles de corregir”, señala, poniendo como ejemplo que en los centros de información, especialmente en el Aula Arqueológica, no haya traducciones al inglés y al francés “como mínimo de lo allí expuesto”.

Plan de actuación, centro gestor y plantilla por convocatoria pública

Por todo ello, el CSIC concluye que es urgente dotar a las Médulas de un plan de actuaciones a medio y largo plazo, que impida “iniciativas dispares como las de los últimos años, que van en detrimento del patrimonio como de una inversión racional de los recursos y, por tanto, de la generación de beneficios para la zona“.

Para gestionar este plan, también apunta a que es urgente crear un centro gestor dotado de una plantilla, mediante convocatorias públicas y competitivas de profesionales de la Arqueología, paisajes culturales y tecnología minera antigua etc. “Obviamente deberían pertenecer a la función pública a través del mecanismo que se considere más adecuado y poseer la independencia de actuación que tiene que tener un centro de esta naturaleza”. El CSIC apuesta porque las guías actuales se encuadren en ese marco institucional público.

Además, el grupo de expertos entiende que ese centro debería tener capacidad para gestionar recursos y que debería depender de la Junta de Castilla y León, que podría actuar en consorcio con otros organismos o instituciones.

Por último, señalan que, en su opinión, la Fundación Las Médulas debería volver a sus primeros objetivos: movilizar recursos (económicos, sociales, etc.) de entidades y asociaciones privadas de la zona para completar la actividad del centro público.

Falta de cumplimiento de las recomendaciones de la Unesco

El primer Plan Director de las Médulas (2001) proponía diversificar los itinerarios de visitas de Las Médulas, para que hubiera un equilibrio entre visitantes, habitantes y medio ambiente. Esto es algo, que según el escrito remitido  a la Junta, “no se está cumpliendo”. “Cada vez se potencian dos únicos puntos de visita: el interior del sector principal de la mina y el mirador de Orellán“, puntos finales de los microbuses recientemente puestos en uso. En el Plan Director se proponía que estos microbuses o lanzaderas, así como posibles todo-terrenos (mediante abono de un canon) hiciesen todo el circuito de la ruta perimetral que rodea la mina, con paradas en diversos puntos de información. “Obviamente, para ello es preciso acondicionar y mantener la senda perimetral y los aparcamientos disuasorios previstos“.

Documentación / Escrito completo del CSIC-Instituto de Historia:

El CSIC y la investigación, valorización y difusión del Paisaje Cultural de Las Médulas 20 años después