511 partidos y 197 goles después, Yuri ya es leyenda. El gran capitán de la Ponferradina se despidió este miércoles de El Toralín en un partido ante su otro equipo de España, el Pontevedra, un choque que tuvo más de emotividad que de fútbol porque la ocasión así lo merecía.
La afición blanquiazul dijo adiós a su ídolo de los últimos 15 años, el de los tres ascensos a Segunda, el de los controles imposibles, el que siempre estaba en el sitio y el momento justos para marcar, uno detrás de otro, 197 goles que le convierten en el máximo anotador histórico del equipo, aparentemente para mucho tiempo.
El banquillo de la Ponferradina se convirtió esta vez en un desfile de excompañeros -allí estaban otros dos iconos blanquiazules como Fran Domínguez y Jonathan Ruiz-, amigos y familiares. No faltaron a la cita Igor y Charles, hermano y primo de Yuri con los que llegó a compartir vestuario en el Pontevedra, y también la siguiente generación, Lyam y Aryán, que tuvieron ocasión de compartir sobre el césped un día tan especial para su padre.
Antes, durante y después del partido todo giró en torno a Yuri, como no podía ser de otra manera. El brasileño recibió la ovación de El Toralín a su salida al campo y los obsequios de Ponferradina y Pontevedra en los minutos previos al choque. Cuando González González pitó el inicio llegó el momento de la magia, con esos toques que siguen provocando sonidos de admiración en la grada. Eso sí, el gol se le resistió a Yuri en la primera parte y fue Jürgens el encargado de anotar el primero del partido.
Tras el descanso, el homenajeado vistió de nuevo la camiseta del Pontevedra junto a su primo Charles durante unos minutos, recordando así al equipo que le trajo a España en los albores de este siglo, cuando empezaba a escribirse la leyenda que hoy pone su punto final. Fue precisamente Charles el que marcó el gol del empate justo cuando Yuri procedía a enfundarse de nuevo la blanquiazul para afrontar el final del partido.
Los últimos minutos del choque fueron de fiesta, con toda la familia De Souza sobre el césped y Yuri dejando que fueran sus hijos los que marcaran los últimos goles, quién sabe si empezando a escribir una historia tan bonita como la que nos deja escrita su padre.
El remate llegó con el esperado gol de Yuri y su despedida final, el momento en el que O Fenómeno enfiló por última vez el vestuario de El Toralín mientras todos los compañeros que le acompañaron en este partido le hacían pasillo y la megafonía desgranaba todos los logros del brasileño con la camiseta blanquiazul. Yuri, hoy, ya es leyenda.
PONFERRADINA (4): Ángel; Jorrín, Andújar, Lancho, Andoni; Markel, Doué; Bustos, Jürgens, Mula; y Yuri.
Después jugaron: Barredo, Ger Nóvoa, Sibille, Ernesto, Brais Abelenda, Yeray, Borja Valle, Carrique, Álvaro Ramón, Álex Costa, Cortés, Esquerdo, Quique, Quinito, Fran, Darío, Igor, Tikinho, Juanjo, Jonathan Ruiz, Jesús, Dieguito, Charles, Malafaia, Kosecki, Omar, Lyam y Aryán.
PONTEVEDRA (3): Manu Vizoso, Igor, Churre, Cambil, Yelko Pino, Chiqui, Xabi Domínguez, Garay, Marqués, Charly y Rares.
Después jugaron: Yuri, Charles, Edu Sosa, Mario Gómez, Álex González, Iago Novo, Rufo, Hugo, Samu Mayo, Anxo, Raúl, Dalisson, Matheus y Diego González.
GOLES: 1-0, min 33: Jürgens; 1-1, min 61: Charles; 1-2, min 82: Álex González; 2-2, min 84: Lyam; 3-2, min 86: Aryán; 4-2, min 89: Yuri; 4-3, min 92: Rufo.
ÁRBITRO: González González.
CAMPO: El Toralín.
